jueves, septiembre 26, 2013

A caballo regalado...


Me parece que la medida destinada a no cobrar el peaje en toda la autopista México Acapulco es populista y traerá graves consecuencias en el corto plazo. Es máS que obvio que el tramo en malas condiciones se puede delimitar de Chilpancingo  A Acapulco. Pero no se cobra en el resto del tramo, el más largo, que va hasta la capital del país y cruza todo Morelos.

Nos encontramos en la situación ideal, lo que tanto habían soñado los prestadores de servicios turísticos: que la gente de la capital pueda viajar en una carretera de altas especificaciones y a bajo precio. Hoy ni siquiera cuesta.
Pero es un regalado envenenado.
El organismo operador de la carretera no tiene ningún ingreso pero tiene gastos. Empezando por la nómina. Y el material y equipo para el mantenimiento.
Hasta me da la impresión de que quienes hacen negocios con los ciudadanos desde el poder han visto la ocasión para volver a privatizar la autopista y cobrar más adelante lo que quieran, con el pretexto de "reponer el deterioro" que se le causará artificialmente con la cancelación del cobro.
Por que no hay ingreso pero el desgaste crecerá porque más vehículos entrarán por esa vía, con el natural desgaste que eso representa.
Con éste gobierno desnacionalizado y sin ética (igualito a todos los anteriores (aunque los dos panistas rompieron récords que parecían inigualables) uno debe desconfiar de todo.

miércoles, septiembre 25, 2013

Quieren privatizar el agua


Ya no sabemos ni de quien cuidarnos. Juan Carlos Valencia Vargas se ve tan decente y bien portado, pero si no nos vamos con cuidado y lo observamos, en el momento menos pensado nos aplicará un golpe del tamaño del mundo a los morelenses.

El titula de la Comisión  del Agua tiene entre sus planes, ni más ni menos, privatizar el agua potable  que se consume en las ciudades y pueblos de Morelos. Específicamente piensa entregar ese negocio a empresas trasnacionales que tienen como finalidad principal lograr ganancias. De hecho, no les importa otra cosa más que eso, las ganancias. Y al costo que sean.
Desde hace meses ha señalado una gran verdad: el sistema de distribución de agua potable ya no puede administrase de la forma en que actualmente se hace, porque todos los sistemas operadores son deficitarios o están en quiebra, y son incapaces de realizar las inversiones necesarias para dar el mejor servicio y hacerlo de forma eficiente.
Hasta allí estamos bien. Eso es cierto.
Lo malo es que él piensa que la solución es entregar el servicio a empresas extranjeras, que dónde quiera que operan lo primero que hacen es subir las tarifas y cortar el suministro a los que no pagan. Los pobres no caben en ese esquema.
Si tiene dudas pregunte usted como les fue en Buenos Aires, por ejemplo. Internet hace posible que usted pueda preguntar sin que le cueste gran cosa.
El agua es un servicio público básico y no puede ni debe ser privatizado. En algunos puntos de Morelos está en manos de particulares, como en algunas colonias de Jiutepec, donde no les va nada bien y el líquido sólo llega cuando los astros se alinean.
Creo que más vale un grito a tiempo.
Y aunque lo niegue, sé que esos son los planes, porque empresas como las que ha convocado para explicar "ejemplos exitosos" no hacen nada gratis.
Por eso lo que se ha avanzado en el tema, hasta ahora afortunadamente puras palabras, incluye motivar a que los municipios entreguen el control de los organismos operadores y que las poblaciones conurbadas centralizan el suministro de agua.
Como medidas pueden ser buenas, pero traen cola.

martes, septiembre 24, 2013

De futbol


El próximo sábado por fin se sabrá de qué cuero salen más correas: el Zacatepec (que por supuesto no es el clásico Zacatepec pero lleva su nombre) se medirá a las Ballenas Galeana en un partido que ocurre por primera vez en la historia del futbol profesional y a pesar de eso ya se le ha dado tintes de clasisismo.

El gobernador criticó hace unos días el juego de los cañeros, molesto por los últimos resultados que tienen a la escuadra al fondo de su grupo, camino de dejar la categoría que tanto trabajo costó conseguir.
Las ballenas no cantan mal las rancheras, no van precisamente en la vanguardia, pero al menos están un escalón adelante que los del Zacatepec.
El equipo presidido en lo económico y administrativo por Alejandro Villarreal Gasca realizó una impactante llegada a la división de ascenso, en la que no se ha sentido muy a gusto, porque los rivales no fueron tan fáciles como en la Tercera División.
Sin embargo, tiene mejor juego que sus colegas sureños, aunque no tiene la atracción que el solo nombre del Zacatepec genera.
Por eso será decisivo lo que pase el sábado en el estadio Centenario. Si las ballenas ganan es probable que logren nuevos seguidores entre quienes previsiblemente abarrotarán las tribunas.
Si el Zacatepec gana no tiene mucho chiste, sólo le dará un pequeño respiro a su agónica situación, complicada porque en México los dueños del futbol hacen mini torneos con pocos juegos, que no dan tiempo a reponerse como sería en una temporada de 40 fechas, como en los viejos tiempos, cuando el robo a los aficionados era menos descarado.
Es obvio que hay implicaciones políticas, comerciales y de todo tipo en ese partido. Ojalá que sea bueno, que se libre en los mejores términos y que después cada quien para su casa y no sea motivo para dejar de atender los muchos problemas que enfrenta la entidad y que deben resolverse a la voz de ya,  por lo menos en teoría, porque en la práctica...

lunes, septiembre 23, 2013

Manuel


Manuel Gutiérrez Oropeza


El texto que publicaré mañana martes 24 de septiembre en La Unión de Morelos, en mi columna El poder y la gloria:
Fue emocionante escuchar de voz de Carmelita Bahena un texto escrito por su esposo Manuel Gutiérrez Oropeza para ser leído en una noche mexicana de hace muchos años, quizá de 1990, no recuerdo bien. 
Manuel -un tipo extraño, impresionante, sin pelos en la lengua, provocador,  extremadamente culto y permanentemente de buen humor (aún en sus peores momentos se daba tiempo para hacer un chiste) habla de la patria, la describe amorosamente desde la infancia ("banderita, banderita, banderita tricolor...")  desde una visión centrista, con núcleo en su Jojutla Zacatepec Tlaquiltenango, que se extiende en su relato, poco a poco, a lo que es la patria Morelos y la patria México.
Lamento no haber guardado en la memoria las palabras exactas. Lamento también que ese sentimiento que Manuel expresa con frases tan precisas, con metáforas claras y que no dejan lugar a dudas, ya no exista entre mis compatriotas, excepto para una minoría en peligro de extinción.
Si existiera ese sentimiento, la ayuda a las víctimas de una tragedia que no se pudo prevenir dejaría de ser el circo en el que se convierten todas las tragedias.
Las lluvias no se alejarán en al menos tres semanas y nuestros políticos (con cargos públicos o sin ellos) se frotan las manos sólo al pensar en las tragedias que faltan, porque son oportunidades para que promuevan su imagen y difundan su (mal) nombre.
Lamento también que Manuel Gutiérrez Oropeza se halla muerto hace tantos años, pero me alegro de que haya dejado por el mundo a tantos amigos, sobre todo como aquellos que el sábado pasado le rindieron un homenaje lleno de buenos sentimientos.
Tuve la fortuna de tratarlo y de que por algunas semanas fuera mi jefe aquí, en La Unión de Morelos.
Y repito, fue emocionante escuchar su concepto de patria, leído con el filtro de los nuevos tiempos que corren y, a pesar de todo fresco, real, verdadero, aunque cada vez mas lejos de lo que somos los mexicanos.