lunes, mayo 03, 2010

En el Olimpo (y la iguana verde)

La austeridad es una palabra que no se conoce en las alturas, en el olimpo donde moran los dioses morelenses, ya que en ese sitio sagrado no han percibido las dificultades económicas por las que atraviesan los mortales.

Ignorantes de la realidad, quienes habitan en la cúspide no sólo siguen su vida normal, sino que se dan el lujo de hacer ostentación de lo que hacen o pueden hacer con el dinero público que administran.
Por supuesto, no le tienen miedo al castigo electoral, por lo que no han tenido límites para apoyar de manera entusiasta medidas tan (le pido, amable lector, poner aquí el calificativo que llega a su mente, porque insisto en que esta es un columna de clasificación A, para todo público) como la reelección de alcaldes y diputados.
Sabedores de que tienen el control (aunque sea indirecto) no temen presumir de sus elevados salarios y sus insultantes prestaciones. De alguna manera lograrán revertir esos malos pensamiento y la catarata de recordatorios familiares.
El problema es que el tiempo se nos acaba.
Ya del dinero destinado al resto de la sociedad poco puede recortarse, porque de por sí todo se va en gasto corriente. Y al final las deudas se tienen que pagar.

P.D.
Por fin logré poner la foto de la iguana verde que tiene un mano a mano diario con el Pingo (quien aparecerá más adelante). Todo esto en el blog personal de su servidor en http://oscardavismtz.blogspot.com

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